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Siempre se ha tratado de los datos. Sólo que antes no teníamos los recursos a nuestro alcance para extraerlos, y por tanto había menos expectativas de hacer algo. Esos días ya han pasado. Si no estás en una búsqueda continua como gestor de flotas para utilizar los datos para perfeccionar tus procesos, crear eficiencias y conservar el presupuesto de tu flota, no estás haciendo tu trabajo.
Los cambios fueron graduales: El análisis de los datos de los informes de las tarjetas de combustible ayudó a mitigar el fraude y a reducir el gasto en combustible. Luego llegó el auge de los sistemas de información de gestión de flotas que rastrean y automatizan todo, desde el combustible, el mantenimiento, los técnicos, los registros de los conductores y las tarjetas de tiempo, hasta los impuestos, los títulos y las licencias. Con el tiempo, te metiste en la telemática para controlar la ubicación y el rendimiento de los conductores, las rutas y los diagnósticos de los vehículos. Es posible que tengas integrado el cuadro de mandos de tu empresa de gestión de flotas para controlar los datos y muchos de estos procesos.
Descubriste cómo gestionar lo suficientemente bien mediante reglas automatizadas e informes de excepción. Pero siempre existió la promesa de que estos sistemas podrían hablar entre sí y que la información fluiría a través de un único panel de vidrio, aunque eso nunca llegó a suceder. Y no pasa nada, porque los beneficios que aportan esos sistemas individuales son más que suficientes para compensar las molestias de gestión adicionales.
Ahora, llegan los vehículos eléctricos. Los EV son algo más que un motor de combustión interna cambiado por una batería. Son ordenadores sobre ruedas, y traen consigo nuevos y mayores requisitos de conectividad, gestión de software y extracción de datos.
He aquí cómo su funcionamiento se suma a las funciones de los gestores de flotas (y de los conductores), sobre todo en lo que se refiere a los datos, aunque esto no es una imagen completa. Comienza con la gestión de la carga de los EV y se extiende a la gestión de los datos de los vehículos y de los conductores.
Supervisión de la carga del vehículo
A diferencia de lo que ocurre con el combustible de un motor de combustión interna, los EV pueden tardar ocho horas o más en alcanzar el 80% de su capacidad en un cargador de nivel 2. Esto obliga a supervisar a distancia los cargadores domésticos o de depósito, a menudo después de las horas de trabajo, para asegurarse de que efectivamente están enchufados y recibiendo energía. Un EV que no se cargue te fastidiará el día siguiente.
Entender el estado de carga de la batería
Con la limitada autonomía de los EV y la falta de infraestructura pública, los gestores de flotas necesitan saber cuánto jugo les queda a sus EV para elaborar una estrategia para no quedarse tirados.
Gestionar la fluctuación de las tarifas eléctricas
Así como aborrecemos los precios imprevisibles del gas, la demanda y las tarifas eléctricas fluctúan según las horas y los picos de carga. Para evitar los costosos cargos por demanda, las flotas deben activar remotamente los cargadores. Con muchas tareas virtuales, el objetivo es automatizarlas estableciendo reglas y alertas de excepción basadas en el tiempo que se necesita el vehículo, la curva de tarifas y el estado actual de la carga.
Acceso a la carga pública del EV
Aunque la mayor parte de la carga debe hacerse en casa o en el depósito, la carga pública debe incluirse en el plan como respaldo cuando sea necesario. Los cargadores públicos funcionan con múltiples redes. Tendrás que suscribirte a una red con la mejor cobertura para ti. Cada red viene con una aplicación propia para localizar sus puntos de recarga. Luego tendrás que controlar los costes por kWh, el tiempo de permanencia y el tipo de carga (Nivel 2 o la más cara carga rápida de CC de Nivel 3). Para ampliar la accesibilidad de los cargadores, un método es suscribirse a varias redes, pero eso requiere otro conjunto de aplicaciones tanto para ti como para tus conductores.
Reembolso de la carga de vehículos eléctricos en casa
Otro aspecto de la gestión de la carga en casa para las flotas consiste en separar las facturas de servicios por gastos personales y de trabajo para la carga de vehículos de la flota, y luego reembolsar al empleado con exactitud.
Gestión de los cargadores
Los propios cargadores, ya sea en el domicilio de los empleados o en el depósito, deben ser mantenidos para minimizar la posibilidad de problemas de mantenimiento. De nuevo, un EV que no se cargue por culpa de un equipo defectuoso te fastidiará el día siguiente.
Gestión de los datos del vehículo y del conductor
La gestión de los datos del vehículo y del conductor sigue siendo importante en el mundo de los vehículos de combustión interna, pero adquiere una importancia aún mayor con los EV. Estos conjuntos de datos son necesarios para comprender la eficiencia de la batería (el componente más costoso de un EV con diferencia) y cómo la autonomía se ve afectada por factores como el estilo de conducción y la carga útil, las paradas, la pendiente de la carretera y la temperatura exterior.
Los gestores de flotas tendrán que controlar los cargadores a distancia para asegurarse de que los EV están enchufados y de que los cargadores funcionan correctamente. Un EV que no se cargue te fastidiará el día siguiente.
Formas de integrar los datos de los EV
Un problema importante hoy en día es que no existen normas ni protocolos de comunicación sobre cómo se comunican los datos de los EV, lo que crea dificultades para recopilar datos de todas las marcas y modelos. Como resultado, no hay una forma establecida de acceder y analizar todos estos datos.
Entre las entidades que pueden acceder a los datos se encuentran la telemática instalada en el mercado secundario, las nuevas plataformas de servicios de datos, los proveedores de tarjetas de flota, las aplicaciones de los proveedores de redes de recarga de EV y los sistemas de gestión de EV de los fabricantes. Cada uno de estos sistemas desempeña un papel específico en la ecosfera del EV, y muchos de ellos ofrecen múltiples soluciones, pero ninguno lo hace todo.
Eso hace que las flotas tengan que integrar los datos de los EV de múltiples fuentes. Esto es sólo una muestra de las hipótesis:
Los sistemas de gestión de EV de los fabricantes de automóviles conectan a sus clientes de flotas con sus vehículos eléctricos. Estos sistemas son esenciales para controlar el estado de los EV en la cola de carga, identificar el estado de carga de la batería, preacondicionar las cabinas, localizar los cargadores, medir el consumo de energía y ofrecer otras métricas sobre el rendimiento del vehículo. Algunos de estos sistemas tienen una sólida funcionalidad, mientras que algunos fabricantes de vehículos eléctricos no tienen ningún sistema o aplicación. Si manejas vehículos eléctricos de varios fabricantes, de nuevo tienes que hacer malabarismos con varias aplicaciones, como la de encontrar cargadores. Si adquieres nuevos modelos eléctricos, ¿estás preparado para gestionar un nuevo sistema y hacer que tus conductores se descarguen y aprendan una nueva app?
Algunos sistemas propios de los fabricantes comercializan el hecho de que se integran con otras marcas y modelos eléctricos. Merece la pena comprobarlo, pero normalizar los datos de otros fabricantes no es sólo un apretón de manos digital. Pero aún estamos en la infancia de la compatibilidad entre marcas y de hacer que los datos fluyan de un lado a otro en formatos fácilmente digeribles.
Tu sistema telemático actual es intrínsecamente compatible con todas las marcas para medir los datos de rendimiento del conductor y del vehículo. Pero como los EV no tienen puertos OBD-II, los datos se obtienen del ordenador de a bordo del vehículo. Esto plantea otros problemas de normalización de los datos que no son insuperables, pero las soluciones no están a la vista. Además, la telemática puede gestionar otras funciones que los sistemas de los fabricantes de equipos originales ofrecen en torno a las baterías de los EV, los cargadores y la gestión de gastos.
Para las integraciones de flotas de vehículos eléctricos de cualquier tamaño y de diferentes marcas y modelos, es esencial la integración de múltiples sistemas. No hay una respuesta fija sobre qué combinación es la mejor, ya que cada situación es diferente. ¿Cómo minimizar el número de aplicaciones que hay que gestionar, asegurándose de que esas aplicaciones se conectan y proporcionan los datos adecuados de forma fiable? Eso depende de la funcionalidad que ofrezcan tus proveedores y de la situación de tu flota.
La buena noticia es que hay un sector que se está uniendo en torno a soluciones holísticas para que tu flota vaya por el buen camino. Entre esos actores se encuentran las empresas de gestión de flotas, los proveedores de telemática, las empresas de software para vehículos eléctricos, las consultorías de terceros y los propios fabricantes. A cambio de una cuota, gestionarán muchas de las cosas difíciles por ti.
El sector está superando estos retos de forma gradual. Si estás a punto de embarcarte en tu proyecto piloto de EV, es mejor que estés preparado para ellos antes de empezar.