Es difícil crear un proceso de mantenimiento de la flota. Pero una vez que lo hayas hecho, el siguiente obstáculo es determinar cómo supervisarlo eficazmente y conseguir que tu equipo se sume a él.
Pero antes, si aún no lo has hecho, asegúrate de consultar nuestro artículo anterior del blog en el que se describen seis pasos para crear un proceso eficaz de mantenimiento de flotas.
Es una buena práctica crear un conjunto estándar de métricas de las que hagas un seguimiento regular de tu flota. Las mejores métricas para supervisar pueden variar en función de la posición que ocupes en la Curva de Madurez de la Gestión del Mantenimiento.
Las métricas a seguir incluyen:
- Métricas de rendimiento
- Volumen de atrasos
- Cumplimiento del calendario
- Porcentaje de desglose
- Métricas de proceso
- Porcentaje de asuntos aprobados
- Carga del cronograma
- Calidad de finalización de las órdenes de trabajo
Independientemente de las métricas que elijas para hacer el seguimiento, asegúrate de que todo el mundo pueda verlas, entienda lo que los datos les dicen y sepa lo que puede hacer para influir en las cifras.
A partir de la experiencia de muchos gestores de flotas puede extraerse los siguientes aprendizajes:
- El seguimiento de las tendencias, en lugar de un solo número en un momento dado, cuenta una historia mejor.
- El establecimiento de objetivos o límites dentro de los cuales hay que mantenerse crea una mejor aceptación.
- El uso de los colores rojo, ámbar y verde como indicadores de éxito hace que todo el mundo entienda fácilmente lo que dicen los datos.
- Celebra los «rojos» porque son tu mayor oportunidad para mejorar y hacer algo para convertirlos en «verdes».
Deja que tu equipo participe
Alcanzar la excelencia en el mantenimiento significa hacer bien todas estas actividades: el software de mantenimiento de la flota, el proceso y las personas. Con demasiada frecuencia, las empresas consiguen que dos de las tres funcionen bien.
Si vas a invertir en la implantación de un software y un proceso de mantenimiento de flotas, te conviene también hacerlo accesible a tu gente.
Es fácil construir el proceso de mantenimiento tú mismo y perder a tu gente en el ruido. Pero ellos son la parte más crucial de este proceso porque son los que tienen que ejecutarlo
Así que elimina los pasos no vitales del proceso para que sea lo más razonable posible para tu gente. Además, asegúrate de invertir tiempo en poner al día a tu gente sobre por qué es importante, cómo utilizar el software y el proceso de mantenimiento de la flota y quién hace qué y cuándo.
La parte de «quién hace qué y cuándo» es una de las mayores palancas de compromiso que puedes utilizar. Deja que tu gente discuta y determine quién es el mejor para:
- Revisar y aprobar o rechazar nuevas emisiones y a qué hora del día hacerlo
- Determinar si es interno o externo para cada tarea
- Desarrollar directrices de programación
- Determinar qué métricas se muestran y cómo
Y, por supuesto, no te olvides de reconocer y recompensar a tu equipo en el momento oportuno.
¡Y recuerda! Lo que se mide se gestiona y lo que se recompensa se repite.
Ser un líder del mantenimiento, implicar a la gente en tu visión, ayudar a tu gente a entender la base de tu gestión de activos y estar abierto a los comentarios fomentará la excelencia en tu equipo. El refuerzo positivo puede llegar muy lejos y fidelizarte a ti y al proceso de mantenimiento.