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En un sector tan competitivo, los gestores de flotas querrán asegurarse de que todo lo que hacen es lo más perfecto posible. Dicho esto, como humanos, no podemos ser perfectos y a menudo cometemos errores; algunos son más comunes que otros. Repasemos cuatro de los errores más comunes que cometen los gestores de flotas al hacer su trabajo. Toma nota de lo que corresponda y trata de ver si has cometido alguno de ellos en el pasado.
1. Uso incorrecto de los vehículos
Cuando los fabricantes diseñan y desarrollan un vehículo, lo hacen con una serie de parámetros. Esto significa que tu vehículo está pensado para funcionar dentro de un rango específico: si lo usas demasiado o incluso demasiado poco, puedes esperar que empiecen a surgir problemas. Por ello, es bueno tener una rotación consistente a la hora de asignar trabajos a los vehículos de tu flota.
Por supuesto, siempre puedes hacer uso de los sistemas de GPS y de seguimiento. Esto ayuda a los gestores de flotas a controlar el uso de los vehículos con bastante precisión, lo que permite a los gestores de flotas planificar mejor y tomar decisiones informadas.
2. Dejar los vehículos al ralentí durante demasiado tiempo
Dejar el vehículo al ralentí está bien en su mayor parte. El problema es cuando no nos damos cuenta de que nuestros camiones permanecen demasiado tiempo al ralentí. La cuestión es que, mientras tus vehículos realizan sus rutas, llegarán momentos en los que los conductores tendrán que salir por algún problema.
A lo largo del día, estos momentos de inactividad tienden a acumularse y a aumentar el desgaste de tus camiones innecesariamente. Afortunadamente, encontrar un dispositivo de seguimiento que se adapte a tu flota es fácil, ya que estos dispositivos pueden controlar el tiempo de funcionamiento de tu vehículo.
3. Falta de reevaluación constante del mantenimiento
Todo gestor de flotas seguro que está familiarizado con la gestión del programa de mantenimiento de la flota de la empresa. Es un paso importante para prolongar la vida de tus vehículos y, al fin y al cabo, debe tomarse en serio. El problema empieza cuando no comprobamos si nuestros programas de mantenimiento pueden seguir el ritmo del uso que hacemos de nuestros vehículos. Esto puede provocar algunas sorpresas desagradables en el futuro.
Por supuesto, el truco para esto es asegurarte de que tienes registros precisos sobre el uso de tus vehículos. Te ayudará contar con plataformas digitales que puedan sincronizarse con los dispositivos de a bordo; con lecturas directas, ¿cómo puedes ser más preciso?
4. No hay una ruta estandarizada
Hay una razón por la que las grandes empresas estandarizan al máximo sus operaciones. Esto se debe al hecho de que la previsibilidad es algo importante cuando los gestores de flotas elaboran planes para las rutas de su flota. Al fin y al cabo, no querrías que tus conductores eligieran sus propias rutas, ya que esto puede complicar las cosas cuando intentas hacer un seguimiento de la distancia que ha recorrido un camión.
Debido a este tipo de problemas, los gestores de flotas han recurrido al uso de técnicas y dispositivos de control digital para seguir el ciclo de funcionamiento de sus vehículos. Esto hace que la fase de planificación general sea mucho más eficiente.
Al final, se trata de cómo utilizas lo que tienes a tu disposición. Con los pasos dados en la tecnología moderna, es perfectamente posible optimizar la gestión de tu flota, todo ello sin arruinarse. Lo único que hace falta es un poco de tiempo por tu parte para aprender a utilizarlas, y seguro que todo ese esfuerzo merece la pena.